Por: Angelo Du Bois
Como cualquier entusiasta y amante de los autos, imaginarás mi emoción al conocer las novedades sobre el lanzamiento del Dodge Viper SRT GT3-R; y todo estaba muy bien, hasta que llegue a leer la parte que habla de su supuesto tremendo poder…
Primero lo bonito… la nueva serpiente de Dodge fue desarrollada en conjunto con la firma ‘Riley Technologies’, trabajando duramente y colocando en escena un armonioso y espectacular cuerpo hecho con fibra de carbono, Kevlar y fibra de vidrio, aumentando la estabilidad de la nave con un alerón deportivo ajustable. Hasta ahí todo bien. Luego, me entero de que aún no hay detalles de lo que su interior posee, aunque sí algunos rumores en base a declaraciones de los expertos de SRT, quienes supuestamente indican que contará con una jaula antivuelco FIA-spec y asientos deportivos de seis broches de seguridad para el harnés. Con fecha de entrega a sus nuevos dueños a partir de la cuarta parte del presente año, imaginé que habrían más detalles de interés, pero me dije a mí mismo, ‘bueno, todo bien’…
Todo era aceptable hasta que llego la hora de la decepción… la súper-máquina sería impulsada por un motor V10 de 8.4 litros con 680 caballos de fuerza y un sistema de transmisión con embrague de competencia multi-discos de 6 marchas… tan poca cosa en cuestión de motor para un súper-auto que se supone competirá en diversas categorías como la FIA GT3, Pirelli World Challenge, NARRA, entre otras… para mí, toda una desilución…
Para finalizar, los precios de éste monstruo de las pistas (porque a pesar de la decepción sigue siendo una bestia de auto) van desde los US$ 459 mil, bastante razonable para ser un GT3…
* Fuente de imágenes: ‘worldcarfans.com’
