El Bugatti Chiron es uno de los coches más exclusivos y deseados del mundo. Su motor W16 de 8,0 litros con cuatro turbos entrega 1.500 caballos de potencia y supera los 420 km/h. Una máquina así no solo brilla por su diseño y velocidad: también sorprende por lo que implica mantenerla en marcha. Y repostar uno de estos superdeportivos es toda una experiencia, tanto por la logística como por el precio.
Capacidad del depósito
El Chiron monta un depósito de 100 litros de gasolina. Puede parecer razonable comparado con un todoterreno de gran tamaño, pero la diferencia está en el consumo: este coche es capaz de vaciar el tanque en menos de 10 minutos si rueda a máxima velocidad en pista. En conducción normal, la autonomía apenas supera los 350–400 km, lo que obliga a parar con frecuencia para llenar el tanque.
El consumo real
Según datos de homologación, el Bugatti Chiron gasta 35 litros/100 km en uso combinado. Pero los propietarios saben que, en la práctica, estas cifras suelen ser bastante mayores:
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Conducción tranquila: 25–30 l/100 km
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Uso deportivo: 40–50 l/100 km
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Velocidades extremas en circuito: más de 100 l/100 km
Un viaje de 300 km por autopista a ritmo alto puede suponer más de 120 litros de gasolina, es decir, un depósito entero.
El precio de llenar el depósito
En Europa, el litro de gasolina 98 ronda entre 1,80 y 2,20 €, dependiendo del país. Si tomamos una media de 2 € por litro:
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100 litros x 2 €/l = 200 € por llenado.
En sí, no es un coste inalcanzable para quien conduce un coche de casi 3 millones de euros, pero la frecuencia de repostaje convierte este gasto en una rutina constante.
El coste anual de combustible
Un propietario que haga 5.000 km al año (poco habitual, pero realista en un coche de colección) gasta aproximadamente:
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Consumo medio: 35 l/100 km → 1.750 litros en total.
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1.750 litros x 2 €/l = 3.500 € anuales en gasolina.
Si alguien lo usa con mayor intensidad —digamos 10.000 km al año—, la factura de combustible puede acercarse a los 7.000–10.000 €.
El detalle exclusivo
Llenar un Chiron no siempre es tan sencillo como detenerse en cualquier gasolinera. Muchos propietarios optan por surtidores premium de gasolina de alto octanaje o incluso combustible de competición para cuidar los motores en condiciones extremas. Ese tipo de carburante puede llegar a costar más de 4 €/litro, duplicando el precio del llenado.
